Sunday 4 December 2011

EDINBURGH'S CASTLE 2


     Prisons of War Exhibition. Los sótanos del Castillo de Edimburgo se utilizaron como cárcel para prisioneros de guerra desde finales del XVIII a principios del XIX. La mayoría habían sido capturados en alta mar durante la Guerra de la Independencia americana y entre ellos hubo, por supuesto americanos, pero también franceses, italianos, españoles,  irlandeses…

     Algunas cosas curiosas que vimos fueron 3 puertas de madera procedentes de aquella época en la que se podían ver algunas inscripciones hechas por varios prisioneros: algunos nombres, fechas, dibujos de barcos…Aunque también es verdad que leí una que ponía “John was here”  del año 90...

     Pudimos ver cuanta ración diaria de comida  tenían derecho por ley los prisioneros. Ésta incluía un par de pintas de cerveza, algo de pan, ternera, mantequilla…Pero a los americanos, que oficialmente eran reconocidos como los rebeldes, como piratas, sólo les tocaban una libra (que son unos 450g) de pan al día.

     Resulta que muchos de los prisioneros eran artesanos con gran talento y utilizando materiales como los huesos de la comida, la madera, papel etc. hicieron cosas asombrosas que luego vendían, como joyeros maquetas, etc. La que más me gustó es ésta.



     The Royal Palace. Donde los reyes y reinas de Escocia vivían cuando estaban en Edimburgo. Fue su hogar durante siglos. Allí se explica la historia de la realeza escocesa. 
 
     En una de sus habitaciones, llamada The Crown Room (la Sala de la Coronación) se pueden ver The Honours of Scotland, las Joyas de la Corona de Escocia: la Corona, el Cetro y la Espada. Forman uno de los juegos de atributos reales más antiguos de la cristiandad. El Cetro fue donado en 1494 y la Espada, la Vaina y el Cinto en 1507. Fueron regalos del Papa (Alejandro VI y Julio II respectivamente).



     Las Joyas de la Corona se escondieron 3 veces a lo largo de la historia. Dos veces durante la década de 1650-1660 para evitar que los ingleses se hicieran con ellas y la última en la Segunda Guerra Mundial, en caso de que los Nazis invadieran.




      En esa sala también podemos ver The Stone of Destiny, la Piedra del Destino. Era y sigue siendo un símbolo muy valioso para Escocia. Las ceremonias de coronación de los primeros reyes de Escocia eran al aire libre y probablemente el rey se sentaba en la Piedra, que simbolizaba la unión del monarca, la tierra y el pueblo.

    Pero en el año 1296, el rey Eduardo I de Inglaterra invadió Escocia y la robó llevándosela a Londres, donde permaneció en la Abadía de Westminster hasta 1996, cuando regresó a Escocia. 

     He leído que el rey Eduardo I puso la Piedra del Destino en un trono que a partir de ese momento se utilizó siempre en las coronaciones de los monarcas ingleses y luego británicos (cuando Escocia e Inglaterra se unieron en 1707) y a pesar de que ahora esté en Edimburgo, parece ser que será llevada a Londres para las futuras ceremonias de coronación.





















     ¡Eso es todo!  Fue una visita muy interesante en la que aprendimos un poco más de la historia de Escocia. Me gustó estar allí pensando en todo lo que había pasado a lo largo de los años en ese lugar, ver construcciones de cientos de años que todavía se conservan...

     Para acabar, os actualizo un poco de cómo están las cosas por aquí. Ya estamos totalmente en ambiente navideño y para no ser menos ya hemos puesto nuestro pequeño, pero no por ello menos especial, árbol de Navidad. Ya empieza a hacer un frío que pela y esta mañana nos hemos levantado con un manto blanco cubriendo el jardín y los tejados. No ha nevado mucho así que no durará. Esta tarde tengo que salir así que espero no resbalarme y caerme!!!!

     ¡Un beso a todos y disfrutad del puente!

Saturday 3 December 2011

EDINBURGH'S CASTLE


     En toda Escocia se hicieron actividades con motivo del día de St. Andrew. Tanto ese día como el fin de semana pasado se podía entrar gratis, o con precio reducido, a ciertos edificios históricos, atracciones etc.
     Así que por fin, el fin de semana pasado entramos en el Castillo de Edimburgo! Lo vimos enterito! No me voy a poner aquí a haceros una tesis del tema (aunque sabéis que podría) así que voy a intentar hacerlo corto y sólo os voy a poner lo más destacable.
     Uno de los primeros sitios que vimos fue uno llamado “The Great Hall”. Se completó en el año 1511. ¿Qué tiene de curioso? Entre otras cosas, conserva el techo original de madera de aquella época. Hoy en día es sólo uno de los dos techos de la época medieval que se conservan en Escocia. Y a pesar de que estemos hablando de un tejado, la verdad es que impresiona.


Alrededor del Hall se podían ver pistolas antiguas, espadas, lanzas, etc.





















   One o’clock  Gun (el disparo de la 1 en punto). A esa hora, un señor vestido de uniforme dispara uno de los cañones, aunque éste es mucho más moderno que los típicos que puedes ver alrededor de la muralla. El disparo se lleva realizando más o menos de manera continuada desde 1861 y antiguamente era una señal horaria para los barcos que estaban en el puerto de Leith y en el Estuario de Forth.
     Arnau y yo cogimos sitio con tiempo suficiente para poder verlo bien. Poco antes de la 1 el señor, solemne, se puso en marcha hacía el cañón….



     Ya a su lado y con un reloj, se puso a controlar los segundos exactos que faltaban para el momento. 

Los de la izquierda fueron unos enchufados que pudieron pasar la barrera


     Como podéis ver yo estaba con la cámara preparada, haciendo fotos de todo como buena turista, pero el disparo me pilló desprevenida y aunque no fue muy fuerte no pude evitar dar un sobresalto. La cámara no se me cayó de las manos de milagro. Pensé que al final no había hecho ninguna foto del disparo, pero parece ser que inconscientemente le di al botón…



     St Margaret’s Chapel (La capilla de St. Margaret). Construida alrededor de 1130. Es el edificio más antiguo de Edimburgo. Curiosidad, desde el s. XVI al s. XVIII fue una almacén de pólvora.

















     Parece ser que no voy a poder cumplir con lo de hacerlo corto (algún día lo conseguiré) así que lo dejaremos por hoy, que ya tenéis suficiente!

     Un beso