Hola!!
La noticia importante del post de hoy es que el jueves pasado vinieron un par de amigas de Valencia a vernos!
Mientras las estaba esperando en el aeropuerto estaba algo nerviosa e ilusionada por volverlas a ver. Como no he tenido que esperar a mucha gente en aeropuertos era una sensación nueva y me vinieron a la mente todas las escenas de reencuentros en aeropuertos que aparecen en las películas. En el grupo de gente que esperaba conmigo había un par con ramos de flores y todo, muy preparados ellos. Aquí os dejo una foto que hizo una de ellas desde el avión que a mí me gusta mucho.
En estos días, por lo tanto, hemos vuelto a ser turistas en la ciudad para intentar enseñarles en unos pocos días lo máximo que pudiéramos de Edimburgo.
Fuimos a los sitios típicos como el Castillo de Edimburgo; recorrimos la Royal Mile, donde paramos a tomar una taza de té/capuccino en un sitio muy acogedor (y muy british todo hay que decirlo) con manteles de encaje y flores en cada mesa.
También estuvimos en Holyrood Park, haciendo una parada en el lago donde parte del agua aún estaba medio congelada; Calton Hill, aquél día salió un sol estupendo y aprovechamos para recargar pilas. Fuimos a un par de museos, como el del Arte Moderno de Edimburgo, visitamos algunas catedrales y por supuesto algunos cementerios!
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| Fotosintetizando |
También tuvimos nuestra ruta de pubs claro está. Por ejemplo, fuimos al Standing Order, un edificio que antiguamente era un banco pero que ahora es un enorme pub. Conserva la estética de los años 50-60 con cámaras acorazadas incluidas y tiene estanterías con libros que puedes ponerte a hojear si te apetece. Allí paramos a comer un día, aparte del plato de cada uno nos pedimos para todos el plato típico escocés llamado haggis. A nosotros nos pareció como morcilla de arroz muy especiada, iba acompañada de puré de patata y otro tipo de puré desconocido.
La última noche para cenar fuimos al Jekyll&Hyde y aquí os desvelo el secreto de la entrada a los baños.
Aprovechando que era tiempo navideño visitamos los distintos mercados que han puesto, fuimos a la feria y nos subimos en la noria y el domingo pudimos ver una carrera de gente vestida de Papá Noel (los niños como elfos) con fines benéficos. Aunque se suponía que era una carrera, sólo unos pocos salieron disparados corriendo, la gran mayoría realizó lo que podríamos decir una marcha y hubo alguno que prefirió intentarlo de otra manera, como podéis ver en la foto.
En fin, fueron unos días de no parar pero valieron la pena. Ahora Edimburgo está más metida que nunca en las compras navideñas. Hemos salido esta mañana y ya había muchísima gente en las tiendas y en todos lados.
Ah! en pocos días estaremos otra vez por tierras valencianas!
Nos vemos pronto!
