Hola a todos, ¡hoy toca un poquito de historia medieval!
Alrededor del año 1125 Edimburgo fue formalmente reconocido como burgo por el rey David I de Escocia. Esta consideración daba el privilegio, por ejemplo, de poder tener un mercado y de esa manera ganar dinero cobrando tasas por la mercancía que entraba en la ciudad para la venta. Probablemente por entonces la ciudad ya estaba delimitada por algún tipo de muro, aunque de madera, no de piedra.
En la época medieval la ciudad ya contaba con varias defensas naturales, como el Nor Loch al norte, o la montaña donde se erigía el propio castillo al oeste. Las zonas sur y este eran las más desprotegidas y por tanto fue ahí donde se planeó la construcción de la primera muralla de piedra, la King’s Wall, documentada por primera vez en 1427. Así que Edimburgo, junto con Perth y Stirling, fue de las primeras ciudades en Escocia en tener muros medievales de piedra. Hay que decir que esta primera muralla delimitaba un espacio muy pequeño, he leído que no mayor a 0.8 por 0.4 km. Es la de color naranja que veis en la imagen.
En 1513 el rey James IV dirigió una invasión del norte de Inglaterra en apoyo a Francia y tuvo lugar la Battle of Flodden (la batalla de Flodden), donde los escoceses fueron no sólo derrotados horriblemente, sino que el rey escocés murió en batalla. Después de eso se esperaba con toda seguridad una invasión inglesa así que en Edimburgo decidieron construir una nueva muralla para la ciudad. Acabó de completarse en 1560 (ojo con las fechas eh! Menos mal que la invasión no ocurrió al final porque les hubieran pillado seguro) y acabó conociéndose como la Flodden Wall (de color rojo en la imagen). De unos 1.2 metros de ancho y 7.3 metros de alto, englobaba un área de algo menos de 57 hectáreas y se quedó como límite oficial del burgo hasta el s. XVIII. Y ¡atención! que dentro de la muralla, por el año 1560, se contaba con una población de alrededor de 10.000 personas!
A lo largo de la muralla había una serie de puertas, llamadas ports. Una de las más importantes, la Netherbow Port, estaba en la Royal Mile y hoy en día se pueden ver unas placas doradas en el suelo delimitando el lugar. Durante mucho tiempo para algunos de los habitantes esa zona fue conocida como "el fin del mundo”, porque para muchos de ellos, incapaces de pagar las tasas de entrada en la ciudad, el mundo que conocían acababa ahí.
Y por último tenemos la Telfer Wall, de color morado, que fue una ampliación de la anterior muralla para incluir unos terrenos comprados por la ciudad. Fue construida entre 1628 y 1636.
Al estar amurallada la ciudad no podía crecer en expansión, así que no tuvo más opción que hacerlo en verticalidad, construyéndose edificios de varias alturas, con la gente viviendo apiñada y creándose unas condiciones insalubres, origen de enfermedades, plagas etc. Esta urgente necesidad de expansión, junto con el cada vez menor temor a invasiones, hizo que las murallas se fueran derrumbando o se fueran incorporando a las nuevas construcciones. Por suerte todavía se pueden ver algunas partes de ellas.
¿Y todo este rollo a qué viene? Pues porque la semana pasada fuimos a ver un callejón, muy cerca de casa, donde se puede ver parte de la Flodden Wall y la Telfer Wall dejándote, con el castillo al fondo, con una imagen de Edimburgo de lo más medieval.
PD. No tengo ni idea de porqué me sale ese fondo
blanco. Lo he intentado solucionar pero nada, así que voy a parar ya y lo
dejaré así de momento, o sino acabaré lanzando el ordenador por la ventana!
Me parece muy interesante esta entrada, un poco de história nunca viene mal y además contada de esta manera se hace muy amena ;) y acompañadas de unas fotos fotos preciosas.
ReplyDeleteEstoy leyendo todo el blog de golpe :) llevaba mucho retraso! y coincido con anyel , me parece muy muy interesante , me recuerda a los libros de ken Follett :)
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